Carta a los creyentes en Roma
Pablo de Tarso
El estudio de la carta a Roma
Pablo.
En este año 2024 ya iniciada la primavera se me está ocurriendo después de a ver finalizado la lectura número 54 de toda la Biblia correlativamente y haber leído los comentarios del pentateuco de Mateo Enrique en la Biblia anota que lleva su nombre iniciar un recorrido por la carta a los romanos con paz y libertad con visión de un discípulo que no conoce las distintas versiones de los escritores de distintas familias denominacionales y centrado en el momento que se escribió la carta y como cristiano bautizado y responsabilizado del testimonio de Dios en Cristo.
Para ello de una manera presente conozco la fecha de su confección, también conozco quien la escribe y desde donde la escribe, año 58 de la era cristiana, escrita por Pablo desde Corintio.
En el saludo a todos los que leímos el escrito entendimos que él tenía conciencia que, para optar a ser apóstol de Jesucristo, conciencia que tenía bien clara y debía de estar en la posición en la que Dios le posiciono (Siervo) en la espera de su formación como apóstol sin perder la actitud de siervo de Jesucristo, formación ya que el creyó que Dios lo llamo para ser apóstol, leímos que el Evangelio fue una promesa de Dios y que se dijo por los profetas en las Escrituras que hablaron acerca de su hijo, nuestro Señor Jesucristo, que era hijo de David según la carne, para nosotros fue importante y vital saber por medio de las Escrituras que pablo como estudioso de ellas y teniendo certificado ese conocimiento por medio de la escuela donde Gamaliel fue su maestro, nos dio confianza y paz de no estar engallados en cuanto a que Jesús venia de la descendencia de David, ya que la Escritura nos enseña que el Cristo debería de venir de la estirpe del rey David, eso se nos enseñó desde la Escritura.
Como creyentes que somos los que recibimos esta carta de Pablo, creyentes en cuanto que Jesús de Nazaret resucito de entre los muertos nos enseñó que esta resurrección fue para declarar hijo de Dios con poder a él descendiente del Rey David es decir; al Señor Jesucristo y esto lo sello el Espíritu de Santidad, nosotros los que recibimos esta carta entendimos la dimensión de alcance de la resurrección para nosotros los creyentes, ya que su poder alcanzaría todas nuestras necesidades para no perdernos eternamente por falta de ser atendidos por él.
Nos quedamos sorprendidos la forma en que en la continuidad de la carta resalta la importancia del nombre del Mesías, así lo entendimos, cuando dio forma que por su nombre se nos ministraba gracia y ministerios apostólico para que todas las naciones alcanzasen fe para ser obedientes y esto fuese por amor, fueron momentos de gozo ya que Pablo nos enseñaba con tanta sencilles que entendíamos sin ser hombres y mujeres de estudios.
A los que éramos de nacionalidad romana se nos recordó que nuestra nación también había sido llamada para ser de Jesucristo, esto consoló nuestro corazón ya que los hebreos que habían creído que Jesús de Nazaret había resucitado introducían variantes formas para ser aceptados por Dios en Jesucristo y no solo por creer en la gracia para todos en la resurrección de Jesucristo, a todos los que estáis en Roma, amados de Dios, cuando leíamos que estábamos llamados a ser santos, nuestros corazones saltaban de responsabilidad y nos decíamos unos a otros; ¿Cómo conseguiremos ser santos en una nación tan corrupta? Pero cuando se pronunció lo siguiente volvió la paz. - Gracias y paz a vosotros ¡Aleluya ¡de Dios nuestro padre y del Señor Jesucristo, entendimos que esta labor de ser santos no estábamos solos, el padre y el hijo estarían a nuestro lado para ayudarnos.
Nos informó que en todo el mundo cristiano se reconocía nuestra fe en Jesucristo y que esto provocó en Pablo actitud de agradecimiento hacia Dios, con ello aprendimos que el ministerio de pablo como servidor estaba funcionando ya que no olvidaba dar información con fondo edificativo, en cuanto a los creyentes en roma Pablo nos recordó que oraba por nosotros, pero oraba con unos fundamentos que sorprendían nuestra falta como investigadores en la vida de obediencia en el secreto de oración, decía; ora por nosotros sin cesar poniendo a Dios como testigo y su servicio era en el Evangelio y en su espíritu, esto marco nuestra vida, como podía tener tanta fuerza para estar orando sin cesar y comprometerse en su servicio poniendo como testigo a Dios, que enseñanzas tan sencillas de entender ya no tanto de practicar, pero entendibles fácilmente, la importancia que le dio a la vida interior sirviendo a Dios en su espíritu bebiendo del manantial del Evangelio.
Su deseo de venir a roma estaba basado en que fuese prospero ya que entendió y nos dio a entender que un servidor tenía necesaria mente que ser poseedor de recursos para compartir, ya daba indicios de Apóstol diciéndonos que deseaba confirmar algún don entre nosotros, don espiritual claro; ya que los dones del Espíritu confirmarían nuestra espiritualidad, al menos eso entendimos. – se decían ya cosas raras por casi todos los lugares donde había llegado el Evangelio, pero nosotros afianzados en el pablo que tomando las Escrituras nos hacía crecer en Cristo, nos enseñaba a no filosofar y estar asentados sobre la verdad de la Escritura.
Seguidamente nos habló de lo importante que es la unidad que crea la fe y con ello en la comunión los unos con los otros traen confort y este confort produce sinceridad a la hora de confesar el no haber podido cumplir con lo acordado, había sido estorbado, pero no dijo quien o quienes le habían estorbado y esto nos enseñó a no sentarnos en silla de escarnecedores, fue maravilloso mientras oíamos a este servidor llamado a ser apóstol: Deseó obtener frutos de los gentiles que habían en roma ya que en roma no solo habían judíos convertidos al cristianismo también habían gentiles, Pablo con su escrito nos enseñó que tenía una deuda con todos los incrédulos del nuevo mensaje evangelicos, a griegos y no griegos, sabios y no sabios tengo una deuda con ellos, despertaba en nosotros la pasión por las almas perdidas, su testimonio fue para nosotros en esta primera etapa de la carta de carácter evangelizador y de unidad entre nosotros.
Su disponibilidad era ejemplar, el Evangelio será anunciado por mí a vosotros a los que estáis en Roma, servidor como Pablo no fueron muy numéricos en estos primeros años, pero si tenemos que decir que fueron suficientes ya que fuimos atendidos en todas nuestras necesidades y todas ellas fueron satisfechas.
Nos dio motivos para no sentir vergüenza cuando tuviésemos que dar testimonio del contenido del Evangelio, es decir; Cristo es Dios encarnado y ha resucitado de entre los muertos, el evangelio es poder de Dios para salvación este fue su motivo evangélico, siempre nos enseñó que creer en lo Escrito era más que importante era vital tanto para judíos como para gentiles, como en roma nos reunimos judíos y gentiles pablo no escondía la Escritura que unió a unos y a otros en la fe en Jesucristo; Como está escrito: el justo por la fe vivirá.
El primer día de lectura de la carta finalizo con la historia y sus consecuencias que tuvo en la generación antigua con tanta claridad se nos recordó la culpabilidad del ser humano, sea hombre o mujer, ósea se ; nos quedó claro que hay seres humanos como en el principio de la creación humana, hombres y mujeres y que unos y otros están llamados en unidad de sexos a procrear y ser felices adorando a Dios: Nos hizo historia de forma tan clara en la que Dios se dio a conocer en esa época por medio de las cosas hechas y fueron sabios ya que de esta forma llegaron a conocerle, sin embargo no quisieron glorificarle como a Dios, ni le dieron gracias, nos pareció que Pablo nos estaba preparando para el próximo día o no se para que día en el que nos alumbraría con la Escritura que Dios siempre se da a conocer a todos los seres humanos, hombres y mujeres y en esta cono ciencia nos invita a seguir siendo productivos considerando nuestra masculinidad o feminidad, tan necesarias y productivas en la medida Divina y obediencia a la Escritura: Fueron tan sabios que se envanecieron razonando pero razonaron tanto que llegaron a quedarse sin razonamiento sano, enloquecieron.
En su locura se entregaron a la idolatría cuando leíamos esta historia del pasado antiguo se nos removía el corazón si el corazón por lo que al continuar leyendo aprendimos lo peligroso que puede llegar a ser idolatra, por ser idolatras Dios les entrego a los malos deseos de su corazón, es decir; a la inmundicia que vivía en sus corazones y deshonraron sus propios cuerpos, al cambiar al Dios creador de todo por las criaturas creadas y darles adoración y nos quedamos atónitos cuando oíamos, las mujeres y los hombres cambiaron el uso natural para procrear y tenían relaciones sexuales entre ellas y entre ellos, y Dios les dio retribución por este desvarió ya que fue catalogado como delito de extravió, la mente reprobada a la que llegaron alcanzar por su corazón no arrepentido, apareció la siega de la siembra.
- Injusticia.
- Fornicación.
- Perversidad.
- Avaricia.
- Maldad.
- Llenos de envidia.
- Homicidios.
- Contiendas.
- Engallos y malignidades.
- Murmuradores.
- Detractares.
- Aborrecedores de Dios.
- Injuriosos.
- Soberbios.
- Altivos.
- Inventores de males
- Desobedientes a los padres.
- Necios.
- Desleales.
- Implacables.
- Sin misericordia.
Veinte un delito se nos dio a contabilizar los cuales se atestaron en el sumario de todo hombre o mujer que forman parte de esta sociedad extraviada, al término de este primer día de lectura se nos advierte que vivíamos con parte de una sociedad que entienden el juicio de Dios, que quienes practican tales cosas son dignos de muerte, no solo las hacen, sino que también se complacen con los que la practican.
Segundo día de lectura.
Fueron momentos difíciles para quienes aceptemos el ser discípulos de los llamados apóstoles, y vivir lo que pablo nos pidió tanto a judíos como a gentiles residentes en Roma, continuamos leyendo la parte que en la carta nos confronto con nuestra conciencia de excusadores ante nosotros mismos de nuestros juicios a las conductas de los demás ciudadanos en Roma.
Conocer el pecado de otro y juzgarle correctamente no era la forma de ser perdonado por el juez si practicaba el mismo pecado, el tiempo del imperio romano y su política social consistía en aprobar la conducta religiosa, ética o moral en base al acuerdo mayoritario y depositarlo sobre un sistema sin personalidad llamado democracia, juntamente con pablo otros apóstoles se nos enseñó que el juicio de Dios está basado sobre la verdad, verdad que asalta nuestro forma de pensar creyendo que podemos escapar del juicio de Dios, trayendo a nuestra conciencia el menosprecio de las riquezas de Dios consistentes en benignidad, paciencia y longanimidad, produciendo la semilla de la ignorancia que impide el arrepentimiento.
Quede impactado con la firmeza que pablo enseñaba acerca del juicio venidero y la forma en que depositaba delante de nosotros el tesoro podrido que será quemado por la ira de Dios.
Se nos enseñó que la salvación de nuestras almas solo era por fe, pero la condenación estaba basada en condenación por obras efectuadas por el falso creyente.
La búsqueda continua de la verdad y la inmortalidad creara un sentimiento de protección en contra de la contención y desobediencia.
Cuando inició la lista de los males a los que se tiene que enfrentar todo hombre, leímos; no hay acepción de personas solo, ya sean judíos y griegos, se nos quedó claro que la salvación no se hereda por la carne, solo en el Mesías hay salvación.
El razonamiento en cuanto a nuestra posición como seres humanos delante del juicio de Dios se nos enseña que no es la ley dada a Moisés la que produce buenas obras dignas de ser recompensadas por Dios, ya que sin la ley dada a un pueblo para construirle en nación se puede vivir moralmente agradando al Dios único que no quiere la muerte de nadie.
Hay secretos que no se desvelan en el presente ya que están almacenados en el razonamiento de cada corazón humano, y saldrán en el día en que en la gran asamblea donde judíos y gentiles pasaremos por el crisol del Evangelio de pablo.
Cuando pablo pronuncio mi Evangelio creo en mí una sospecha, ¿se estará desviando Pablo de la verdad? pero, entendimos que fue la forma de darnos a entender la frase de mi Evangelio y la enseñanza de su contenido, contenido que Dios en su paciencia espera nuestra confesión y que no guardemos ningún secreto para el fin de nuestros días.
Los hermanos de origen judío recibieron una dura exhortación en el momento en que pablo escribe la historia del pueblo judío hasta ese momento en el que trae a memoria el mal comportamiento de los judíos, amparados en que siendo depositarios de las promesas hechas a los patriarcas creyeron que eso les daba inmunidad ante Dios, pablo como Israelita entendió que no tenía privilegio para ser consentido en su vida como trasgresor de la voluntad de Dios, nos enseñó en esa lectura de la carta que la circuncisión dada a los nacidos como hebreos fue un símbolo carente de continuidad en el presente para quienes aceptásemos a Jesús como salvador de nuestras almas y su circuncisión pasaría a ser efectiva en nosotros en el bautismo en agua, ya que en el bautismo se hecha fuera el cuerpo carnal con sus hechos y pensamientos, ya que en el bautismo efectuado por Juan Bautista el Cristo entro en las aguas como el cordero de Dios y de esa forma entro con nuestros pecados y legitimo el bautismo que tres años más tarde se efectuaría en el nombre del padre hijo Espíritu santo.
Tercera lectura.
Pablo inicia su aclaración de la circuncisión dada Abram como señal de quienes la efectuasen se numeraban como ciudadanos del pueblo hebreo.
- Ventaja y provecho.
- El circuncidarse.
Muncha ventaja.
- Se nos confío la palabra de Dios a los hebreos.
- Se nos enseñó a los judíos discípulos del Mesías que el Dios de Abram, Isaac y Jacob para unir el pacto de obras en dado al primer Adán con el pacto de gracia dado al postrer Adán el cual es el Señor, la incredulidad de algunos hebreos no anula la promesa hecha por Dios, se nos recordó que Dios dice más que verdades es veraz por naturaleza ya que no es hombre para que mienta cuando se ve sin posibilidad de cumplir lo prometido, ya que la Escritura nos recuerda que Dios siempre vence en todo juicio. – Salmo: 51.4/ La forma en que Dios ha tratado con paciencia a la descendencia de los patriarcas envolviendo en su proyecto del pacto de obras y gracia la salvación de todos los que en él creen, para que en la injusticia de nosotros los judíos resaltase la justicia de Dios, ¿Qué argumentaremos ante tal conducta Divina? ¿acusaremos a Dios de injusto? No hay sabiduría en el hombre para entrar a comprender los juicios de Dios, ya que entendimos que Dios tiene que juzgar al mundo y su comportamiento con nosotros el pueblo hebreo en cuanto al dolor en la persecución por ser semitas tiene dos caminos.
- Por ser depositarios de su existencia.
- Por vivir fuera de la voluntad de Dios.
Por esos dos puntos entendimos los judíos discípulos del Mesías que ser judío y discípulo de Cristo es una doble bendición y doble persecución, se nos acusa de alentar a la desobediencia de hebreos contra gentiles y de gentiles contra hebreos, eso lo dicen entre nosotros hebreos y gentiles culla condenación es justa ya que ni son hebreos en conducta cumpliendo con todo lo que como circuncidados deben de practicar, ni como gentiles con corazón noble y haciendo lo correcto por naturaleza.
Siempre nos maravilló pablo a los Judíos al menos en esta ocasión a los que recibimos esta carta por qué nunca decía nada que no tuviese su origen en la Escritura hebrea, para defender como abogado de Dios y su forma legítima de la forma en que se había comportado desde Adán hasta Noé y llegando doctrinal mente hasta Cristo y hasta estos momentos entre nosotros año 50 del tiempo del pacto de Gracia, mostrando que siendo culpables todos nos trató con paciencia mientras los seres humanos vivián, buscando la forma justa de no condenarles al lugar de tormento.
No hay Justo ni uno
Salmos: 14.13/ 53: 1.3/ 10.7/ Isaías: 59: 7.8/ y para enseñarnos que lo que dice la ley es bien claro que es para quienes nos hemos circuncidado nos citó la siguiente Escritura, Salmo: 143: 2/ Escritura que aprendimos que nadie se puede justificar de su desobediencia con cubrir con una obra la desnudez de su estado como intento Adán.
En el siguiente razonamiento pablo nos concluyó que en el pacto de Gracia puesto en legitimidad por la fe en la sangre de Cristo la ley había cumplido su cometido ya que no hay más que un Dios y padre de todos, judíos y gentiles, tanto judíos como gentiles estábamos destituidos de la gloría de Dios, ahora en Cristo hemos sido justificados todos los que creemos en Jesucristo, ósea que él es el justo y el que justifica a los que son de la fe de Jesús.
Cuarta lectura.
Pablo siempre os invitaba a pensar a sí que seguimos leyendo y nos encontramos que debíamos decir en cuanto que encontró el padre Abraham, según el carné, y nos ayudó con el siguiente razonamiento; podía nuestro padre Abraham gloriarse si el origen de su justificación fue por obras, y en esta justificación no tendría su origen en Dios, y como siempre Pablo encontró la respuesta en las Escrituras y leemos; en la Escritura dice que Abraham creyó a Dios y fue justificado, ósea; se le contabilizo.
También despertó nuestra memoria con lo que dejo documentado el Rey David acerca de la bienaventuranza del hombre que se le perdona de ofrecer méritos para alcanzar el perdón, los hermanos judíos y gentiles en Roma entendimos que los circuncidados y los no circuncidados se os agrupaba en la fe del padre Abraham, ya que él recibió la justificación sin estar circuncidado y más tarde el sello de esa justificación la obtuvo circuncidándose y de esa forma se convierte en padre de los incircuncisos, como de los circuncidados en un acto de fe, ya que sin fe no se nace de nuevo. – Si los circuncidados son los herederos, la fe no sirve para salvar a los que creeos en Cristo, ya que la salvación es por medio de la promesa hecha Abraham, en tu simiente serán benditas todas las familias de la tierra.
Puesto que la herencia tiene su origen en pertenecer a quien la posee, Dios hizo Abraham padre de los incircuncisos y de los circuncidados y siendo padre de todos, todos somos herederos por fe de las riquezas de Dios, como está escrito en el primer libro de la Torá, cuando Dios cambio el nombre de Abram por Abraham; padre de muchedumbre de gentes, el cómo siempre finalizaba Pablo el argumento fue por medio de la Escritura y de esa forma entendíamos su doctrina del nuevo pacto de gracia.
Los momentos que vivimos tanto judíos como gentiles en Roma no fueron fáciles, ya que las persecuciones fueron continuas, después de los dos primeros años en los que pablo gozo de una comodidad predicando la palabra en una casa alquilada, continuaron las molestias por ser discípulos de la secta judía conocida como los del camino.
Pablo siempre nos animaba con sus heridas y con ejemplos de los hombres y mujeres del pasado, cuando nos habló en esta carta del padre Abraham y de su esposa Sara, quienes por 25 años estuvieron esperando el cumplimiento de la promesa y no llegaba, nos hizo entender que creyó Abraham con una doble esperanza, es decir; desdoblaba su esperanza con una fe tan poderosa que creyó y no dudo contemplando su cuerpo y el de su esposa, ya que la promesa estaba basada en lo que había conocido del que le prometió el cual nunca le dejo sin experiencia en los 25 años que vivió con Dios, se escribió que su fe le fue valida a él y sello fe para los que creemos en la resurrección de Jesucristo y por él hemos sido justificados.
Quinta lectura.
Continuamos en paz, paz que se nos recordó que llegó a nuestros corazones mediante nuestro Salvador Jesucristo y entrada por fe, entrada a la gracia, gracia que produce en nosotros firmeza que a la vez produce actitud de gloria y que esa gloría está en nuestro gran Dios y el mismo produce esperanza.
Eran momentos de mucha tribulación y necesitamos una explicación de nuestras tribulaciones por ser discípulos del Mesías, Pablo nos explicó que la paciencia que observo en nosotros fue el fruto producido por la semilla de la tribulación y continuaremos en prueba con el fin que esa prueba produzca esperanza, haciendo memoria que la esperanza que tenemos no produce vergüenza ya que esta fuerza es consecuencia el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado, la debilidad nuestra fue la causa por la que Cristo murió y lo hizo por los impíos, que enseñanza recibimos tanto Judíos como gentiles cuando apelo que nuestra bondad puede alcanzar el bien de una persona buena, pero si hay que morir por un justo eso está lejos de los impíos, Dios sobre paso los razonamientos humanos y murió por buenos sin haberlos, pecadores e impíos.
La sangre del Cordero de Dios no solo nos perdonó el pasado, también nos liberó de la irá, ósea; del juicio de obras, ya que nadie podía justificarse por sus propias obras, enseñándonos que nos justificó en estado de enemistad con Dios, se nos animó a que abrazásemos la doctrina de la intercesión continua del sumo sacerdote según el orden de Melquisedec, su bautismo en el Jordán y su posterior muerte fue nuestra perfecta reconciliación y la seguridad de nuestra salvación en Cristo.
La forma tan especial con la que Pablo nos explicó a Judíos y gentiles las dos formas jurídicas en las que Dios castigo el pecado desde Adán a toda la raza humana, no solo hasta el diluvio sino hasta que Cristo el Cordero de Dios aparece en el río del Jordán extendiendo la forma jurídica de castigar y perdonar a todos los que desobedecen y obedecen, las pautas de la naturaleza engendrada en el corazón humano como nos explicó en días anteriores, el pecado de Adán manifestado en la muerte para todos engendrados por hombre, pero en la muerte del único hombre no nacido por engendro de hombre introduciría la vida en el espíritu dándole posesión de eternidad, en Adán todos morimos, en Cristo todos vivimos, por la transgresión de uno vino la condenación a todos los hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los hombres la justificación, Dios nos justificó creando una constitución y entendimos que dentro de la constitución existen valores que hay que respetar, del mismo modo que viviendo se muere, también muriendo se vive.
Sesta lectura.
Al siguiente día iniciamos la lectura y nos encontramos relacionándonos con la ley de Moisés y la Gracia en Cristo, se nos tuvo que explicar ya no en términos jurídicos, ahora teníamos que enfrentarnos a la ley literal de Moisés, la cual nos sentaba a todos en el banco de los acusados y sin defensor ya que nuestra defensa era nuestra vida de practica de ella, se nos olvidó que el bautismo en agua y en su nombre Dios lo dio como valido para ser resucitados simbólicamente el día que Jesucristo resucito, Pablo no recordó este gran milagro y despertó en nosotros que ya no podíamos seguir pecando ni aun creyendo en la falsa doctrina que había entrado en Roma que decía, decía que si deseamos más gracia, tenemos que seguir pecando; Pablo nos recuerda que la Gracia no se multiplica por pecar, la Gracia ha sido derramada en su totalidad en la muerte del Cordero de Dios ya que no dio parte de su vida la dio toda, hemos sido liberados de la ley por medio de la cual no se podía alcanzar la meta de la justificación y al no estar bajo la ley hemos sido liberados del pasado, del presente y del futuro, ahora y siempre no dependemos de nosotros, dependemos del gran pastor de las ovejas el obispo eterno, el pecado ya no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia, la paga del pecado no es recompensada con más gloría, la paga del pecado es muerte.
Séptima lectura.
Esta lectura a los Judíos les dejo en una situación expectante cuando pablo con esa forma tan especial y conocedor de la Tora explico con el ejemplo del matrimonio y la relación entre hombre y mujer en su estado perfecto de convivencia y la forma en que cambia el estado de decisión de tomar otro hombre en vida de su marido legítimo, no puede otro hombre poseerla como esposa si el legítimo vive, solo si muere puede tomar otro hombre, ya que si eso lo lleva a efecto, será llamada adultera y por ende será muerta a pedradas, la ley de Moisés fue el marido de los hebreos y no podía el pueblo Hebreo ser de otro si la ley no moría, Cristo mato a la ley cumpliéndola ya que la ley tenía tiempo de caducidad y pudo casarse con el pueblo hebreo y salvar a todos los que creyendo en él nos reconcilia a todos haciendo de todos los pueblos semitas y gentiles un solo y único pueblo.
Octava lectura.
No dejaron de ser benditos los días anteriores al octavo cuando mientras leímos el recuerdo del Salmo. 44. 22. Que dice; por causa de ti somos muertos todo el tiempo; somos contados como ovejas al matadero. – En eso recuerdo del salmo iniciamos a comprender lo que era vivir en el Espíritu y por el Espíritu y se ilumino nuestro entendimiento entre la ley perfecta dada a Moisés en los 10 mandamientos y el nuevo mandamiento del Mesías para salvarnos y liberarnos de las obras muertas de la ley y sus artículos de convivencia para un pueblo especial, ósea se; el pueblo de los patriarcas, Abraham, Isaac y Jacob.
Estar en Cristo os decía pablo era estar posicionado como libre de toda culpa, y para ello no era necesario ser del pueblo de los patriarcas hebreos, ya que estar en Cristo el Mesías te concedía el ser perdonado y heredero de las riquezas dadas a los patriarcas, ahora ya nadie podía condenarnos, ni por pecadores ni por intrusos en el sentido de no pertenecer a la descendía patriarcal hebrea, al recibir el Espíritu que resucito al Mesías de entre los muertos quienes creemos en Jesús como hijo de Dios podemos vivir conforme a los designios de Dios, ya que el Espíritu nos ayuda a vivir en santidad, vivir en la carne entendimos que era vivir bajo el yugo de las ordenanzas de la ley que no podíamos cumplir para la debilidad de humana, nos que do claro que Dios nos hizo suyos porque nos dio el Espíritu de Cristo, y por ello se nos recuerda que vivificara nuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en nosotros.
El ejemplo que tomo Pablo para exhortarnos a soportar las pruebas del presente, es decir; la situación de la misma naturaleza que permanece esclava y que también ella será liberada, nos liberó del temor diario de no ser atendidos ya que siendo adoptados y no hijos según el ADN patriarcal hebreo, se nos aclaró que así como la tierra esta parcelada entre distintos titulares y por ella esclavizada, será liberada juntamente con los hijos de Dios para volver al único y verdadero dueño y Señor de todo, El Mesías Jesucristo el Señor.
Ante todos los problemas que estábamos viviendo y los que nos podían llegar en el futuro, debemos de considerar que somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
Estar en Cristo os escribió Pablo, era ser escogido, estar justificados, estar en su intercesión, predestinados con propósito, conocidos por él, llamados por él, glorificados por él, leímos la pregunta; ¿Qué púes diremos a esto? ¿Si Dios es por nosotros, quien contra nosotros?
Dios no escatimo ni a su propio hijo, con él nos dará todas las cosas, entendimos que es en él; su hijo. – Nuestro gran Dios y salvador Jesucristo.
Cuando iniciamos la lectura del día noveno, nos fue imposible esperar al día siguiente para seguir con la lectura del día decimo, pero nos ocurrió lo mismo y seguimos leyendo la lectura del día decimo primero.
Conocedores los judíos que estábamos viviendo con los discípulos gentiles en Roma que la salvación viene de nosotros como le recordó el Mesías a la samaritana en el pozo de Jacob, pablo nos recordó en el día noveno que la elección de Israel se basa en lo que dice la Escritura relacionado con la fe y no por ser descendientes en Abraham, la expectación de Judíos y gentiles el cómo Pablo nos daba luz del amor de Dios perfecto para salvar a la descendencia de los patriarcas hebreos y convertirles en la matriz de la salvación a quienes según la carne no había promesa, es decir los gentiles, para darnos a entender a judíos y gentiles nos enseñó que Dios no hierra cuando ama pensando en futuro, a Jacob ame y aborreci a Esaú.
Nos mostró que la palabra de Dios no había fallado por que la generación en la cual estábamos en la que llego el Mesías era la generación del cumplimiento del enfrentamiento entre el pueblo circuncidado y el incircunciso, trayendo a memoria al profeta donde se dice que llamaría pueblo al pueblo que no era suyo, quedamos todos los discípulos sorprendidos, judíos y gentiles; leímos que no es del que quiere ni del que corre, que no se trata de ser descendiente de los patriarcas hebreos, que tanto judíos como gentiles necesitan fe para ser salvos y todo tenía que ver con la potestad que tiene el alfarero con el barro en su lugar de trabajo.
Israel no entendió que, habiendo recibido toda la riqueza para administrarla a todas las naciones, quiso mediante la obligación de la ley y no entendió la gracia del momento en la persona del Mesías, pero pablo dio una palabra de respiro a los judíos cuando dijo, Dios no había desechado a su pueblo ya que él era israelita y recordó la Escritura donde se profetiza que la manada pequeña es la soberanía de Dios en guardar la simiente de los patriarcas.
Se nos hizo claro que la soberanía de Dios es para salvación a todo aquel que cree, tanto a judíos como a gentiles, la paciencia de Dios soportando los vasos de deshonra, tanto de judíos como de gentiles y de honra tanto de judíos como de gentiles, la puerta de la eternidad se nos hizo más clara y ancha en la medida en la que podíamos ver la existencia del Dios hebreo que se manifestaba en el presente tomando las riendas del universo que el mismo creo.
Que el no hizo diferencia en salvar tomando decisiones de salvación por medio de su conocimiento anticipado de todas las cosas, dejo la guía de su palabra por medio de los profetas para que nadie se pierda, en cuanto al pueblo de Israel como tal se nos enseñó que al igual que los gentiles no todos los nacidos son salvos a consecuencia de su práctica de pecado, los israelitas tampoco; solo el remanente será salvo.
La ley establecida para salvar a los que se les dio, dice; el que la cumpla se salvara. – Por ello llego la gracia después de que el Mesías cumpliese con la ley y establecer un nuevo pacto sobre nuevas promesas sin la practica ceremonial ya que todo ello fue la sombra de lo que había de venir y quitar las diferencias entre los dos pueblos, judíos y gentiles.
Invocar el nombre del Señor produce salvación, leímos; el nombre de Dios entre el pueblo hebreo fundamento de la naturaleza de su proyecto entre los que le obedecen para salvación, pues la Escritura dice: Todo aquel que en él creyere, no será avergonzado.
Nos consuela la idea de que no todos obedecen al Evangelio, no por eso se nos dice que tenemos que seguir anunciándolo, pero, para poder anunciar el Evangelio tenemos que ser llamados por Dios para ello, verdad que entendimos claramente.
La forma que pablo nos razono el trabajo de Dios por medio de los profetas y en este último tiempo por el Mesías nuestro gran Dios y salvador Jesucristo quedo entendido en nuestros corazones, Dios no había desechado a su pueblo consiguió por medio de él su deseo de abrazar a los gentiles por medio de la fe y reservar un día en la historia de su proyecto final, se nos hizo comprensible el por qué Israel no consiguió porque quería alcanzarlo por obras y tenía que ser por gracia.
Los Israelitas son enemigos del Evangelio y esto es por causa nuestra, es decir; los gentiles. – En cuanto a la elección son amados por causa de los padres, no salvos; sino amados. – lo que entendimos que Dios no desecha siempre tiene la gracia sobreabundante para seguir llamando y eso siempre por amor a quienes promete no olvidar a su descendencia.
Quien leía la carta seguro que estaba temblando como el resto cuan llego el momento en el que oímos; si Dios no perdono a las ramas naturales a ti tampoco te perdonara, la obediencia se hacía doctrina mientras escuchábamos al lector.
Sentimos la emoción de pablo en la parte de la carta en la que con signos de exclamación exaltando la sabiduría de Dios por la profundidad de la justicia de Dios y sus juicios traía a nuestra memoria que Dios nunca necesito consejero para cumplir con su deseo del plan eterno y que lo culmina con su encarnación mostrando todo su poder resucitando de entre los muertos.
Los días décimo segundo hasta el décimo cuarto, fueron días poderosos ya que en ellos se nos compartió la vida de obra entre los discípulos, se nos aconsejó a conocer la debilidad de nuestro cuerpo mortal y su fuerza a la vez, debilidad para almacenar espiritualidad y fuerza para desarrollar el trabajo físico entre los discípulos.
Todos los nacidos teníamos una labor dentro de la iglesia como la tienen todos los miembros de un cuerpo, la esperanza, el sufrimiento debían de ser adormecidos por estar despiertos en la oración, algunos estábamos incomodos cuando se leía que había que pagar impuestos y estar sujetos a la autoridad romana, eso causo molestias pero en la continuidad de la lectura y el recuerdo de los mandamiento dados a Moisés entendimos que vivir entre los que no son creyentes requiere sacrificio por parte de los que somos discípulos del Señor.
Bien conocedor era pablo de la vida desenfrenada de los que no eran discípulos, glotonerías, borracheras, lujurias y lascivias, contiendas y envidias; se nos llamaba a la honestidad y nos llamó la atención la frase, no proveáis para la carne, entendimos que la naturaleza humana es como un almacén donde se puede apilar montones de miseria como era roma en estos momentos.
La sociedad civil en roma se formaba para competir en ella por lugares políticos, en las cátedras de filosofía, la investigación, deportes y ciencias en general entretejidas en la cultura griega, pablo nos enseñó que entre los discípulos no debía de haber contiendas basadas en opiniones ya que esto deja fuera a los débiles por falta de formación intelectual.
Nos enfrentó a la realidad que la cuenta de nuestra vida histórica dará sus resultados delante de Dios y que en ese momento estaremos ante él y nadie nos acompañará en ese momento crucial de nuestra vida para dar cuentas a nuestro creador y gran Dios Jesucristo.
En cuanto a nuestra vida socio religiosa con los que están fuera del camino y sus sacrificios a sus dioses, nos capacito pablo con la forma tan característica de los ejemplos que adorna sus pensamientos, Dios es el que vigila nuestra conciencia y vela sobre ella, debemos dar a conocer nuestro fundamento como discípulos del Señor y nuestra vida social debe de estar entre los que o creen como nosotros, tanto judíos como gentiles, el juicio de los que viven sin el conocimiento de la ley y la gracia les conduce a estar en una religión de dioses y para sentirse protegidos tienen dioses a quienes sirven con distintos sacrificios y comen de esos sacrificios, haciendo una mezcla entre la doctrina judía y la gracia, pero nosotros los discípulos del Mesías no proclamamos la deidad de sus festines si comemos de lo sacrificado en algún momento puntual si somos invitados por alguno de ellos, si ellos piensan que hacernos comer de su comida ensalzamos a su dios se equivocan, nos abstendremos de comer y lo haremos perfecto.
El reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y gozo en el Espíritu y Santo, debemos seguir la paz y la mutua edificación, el comportamiento de los discípulos tiene que ser siempre sin el ánimo de destruir a quienes no entienden nuestro proceder basado en la fuerza de nuestra fe, fe que algunos no tienen en esos momentos, tienes tu fe, tenla para ti mismo, así que los fuertes tenemos que soportar las flaquezas de los débiles y no agradarnos a nosotros mismos.
El décimo quinto día nos selló con el recuerdo que todo lo que se escribió, fue para nuestra enseñanza; fuera de la Escritura no hay consuelo ella nos nutre para que la esperanza no abandone el depósito de la paciencia y a si estemos siempre dedicados al aprendizaje de quien es nuestro gran ejemplo, el Señor Jesucristo, quien nunca se agradó a sí mismo, nos hizo un examen tan personalizado que nos dio confianza a nosotros mismos para que unidos judíos y gentiles como discípulos del Señor fuésemos capaces de entender al profeta Isaías quien profetizo del proyecto perfecto para Israel por medio de la circuncisión almacenando en ella por siglos la esperanza del Evangelio para los gentiles y restaurar en el tiempo postrero a la manada pequeña, es decir al remanente que en el tiempo de la gracia reciben a Cristo y son parte del proyecto del Evangelio para todas las naciones como prometió Dios al padre Abraham que en su simiente sería bendecidas todas las naciones, cuando la plenitud de los gentiles esta como Dios deseó el Israel será salvo.
En judea seguía la rebeldía de grupos judaizantes que estaban contraviniendo la doctrina que Pablo predicaba entre los gentiles y nos pidió que orásemos por el para que fuera librados de estos grupos que solo hacían daño y que no deseaban ver en las Escrituras la salvación de los gentiles por medio de la doctrina del Evangelio, es decir; del nuevo pacto en el pan y la sangre del Mesías anunciado por los profetas, este fue el motivo leímos que nos escribió esta carta, que las señales, prodigios y milagros que fueron hechos entre los gentiles parra entendiésemos que debemos de obedecer al Evangelio para salvarnos, predico a todos los gentiles desde Jerusalén gasta Llírico y preparo su viaje hacia roma con la idea de llegar a España que se decía que era el fin de la Tierra.
Entramos en el décimo sesto día leyendo esta carta de pablo a los discípulos judíos y gentiles en Roma, quedamos asombrados de su capacidad pastoral el cómo recordó a todos a quienes tenía que exhortar, recomendar, animar y como no homenajear por su responsabilidad y trabajo desde su conversión y discipulado.
Terminamos de leer que Dios confirmaría todo esto por medio de su Evangelio, todo lo que estaba oculto desde tiempos eternos pero que ahora, es decir; en nuestro siglo ha sido manifestado para la salvación a todos los hombres, aquellos que obedecen a la fe.
Al único y sabio Dios, sea la gloria mediante Jesucristo para siempre amen.